Sitio muy chulo donde puedes degustar cervezas caseras y un buen pollo asado y marinado en aceite de oliva y hierbas frescas durante 24 horas. El ambiente está muy bien y te sientes muy cómodo y relajado. Todos los comensales hemos salido muy satisfechos y contentos. Gracias por un buen rato.

Desgraciadamente no le tomé foto a la alitas que pedimos, solo pudimos comer una. Son las primeras chicken wings spicy en el mundo que son hervidas, la consistencia del pellejo era muy pero muy asqueroso. Lo que lo salva es la chela de barril que te puedes servir en la mesa. El lugar utiliza una aplicación para ordenar desde tu mesa sin necesidad de de que vaya algún mesero a tomarte la orden. Esta idea esta increíble, sin embargo, deberían practicar más el tema de la atención al cliente en general.

Es uno de los mejores bares donde he comido en Ámsterdam. Esta especializado en cervezas y luego tiene combos de comida con costillar, carne, pollo a la brasa. La decoración es la típica de mesas corridas con bancos sin respaldo, aunque también tiene mesas para 4 o 6 con sillas. Por supuesto, la carta es en holandés o ingles y los camareros y camareras hablan ingles, nada de español.

Un buen sitio para tomar una cerveza y algo para picar. Tomamos unas bitterballen (una especie de croquetas holandesas) y una degustación de cervezas variadas. En total fueron unos 20 euros. La atención fue buena, aunque alguna camarera andaba un poco despistada. El local tiene muchas mesas en el interior, y una terraza en un callejón en la que se está bastante bien.

Parada obligatoria en esta cervecería, tienen como especialidad un pollo a la brasa que está increíble, la cerveza elegida fantástica como pa tomar una tras otra, lugar con buen rollo y lo bueno es que hay camareros que hablan castellano y al ir sin reserva no pusieron una mesa sin problemas cosa que se agradece!!