Hemos disfrutado de un roscón absolutamente extraordinario… de un tamaño grande, al que llamo roscón Scalextric. Excelente es tanto su textura como su sabor. La presentación impecable. Lo pedí de nata porque sabía que la pastelería Luzón es una garantía de que la nata fuera estupenda (cosa que cada vez es menos habitual). Pero el roscón en sí mismo es un roscón muy rico, ‘de verdad’, de un sabor equilibrado…sin ninguna duda recomendable, como son todos los productos de esta más que recomendable pastelería de la calle Conde de Peñalver 42. ¡Todo un éxito! ¡Muchísimas gracias por proporcionar tan delicioso producto y por la amabilidad en el servicio!

Compré unos huesos de santo, unos buñuelos y un bartolillo en la pastelería Luzón. La verdad es que los huesos de santo y los buñuelos me dejaron un poco decepcionado; los compré para probar y comparar con otras pastelerías de distintos barrios, y, aunque estaban correctos, resultaron bastante normalitos, nada espectacular. Sin embargo, el bartolillo sí me gustó un poquito más. Es una buena pastelería, pero para quienes buscan algo fuera de lo común, puede que no destaque demasiado.

Pastelería mítica del Barrio Salamanca, mi familia lleva toda la vida comprando ahí! El finde fui a recoger un encargo para un cumple y se me había olvidado ese olor que sale del obrador a tarta recién horneada que te da ganas de probar todo!! Y de trato son súper cercanos y amables. Esta vez cogimos tarta de queso con frambuesa y tres chocolates, ambas personalizadas, y nos encantaron!! Y empanada de atún de aperitivo, que no puede faltar en la mesa!! Además no me pude resistir y piqué con unos buñuelos de Baileys, tarta de queso y dulce de leche.. Brutales!! Y unos croissants rellenos que también están de locos!! Deseando que llegue Navidad para catar un año más su Roscón de Reyes, y de paso probar nuevas cositas que he fichado!!!! De verdad que está todo riquísimo!! Me encanta saber que contamos con ellos en nuestras reuniones y celebraciones!!

La Pastelería Luzón es la más antigua del Barrio de Salamanca en Madrid, con más de 85 años de historia y siete generaciones de maestros pasteleros dedicados a la elaboración artesanal de dulces y postres, todo es muy bueno, excelente y atendido directamente por su simpático dueño y su hijo

Hoy he estado en la maravillosa Pastelería Luzón, la pastelería de la iglesia de toda la vida y he comprado uno de los panettones más ricos que me he comido nunca, de pistacho y chocolate blanco. Espectacular. El próximo día cae el clásico. Los polvorones, hechos de manera artesanal y con cariño por Antonio con almendras y avellanas son unos imprescindibles de la Navidad. Totalmente recomendable